SATT cumple 5 años de servicios regulares e incorpora tecnología

Con más de dos décadas de vinculación con el turismo y 5 años de actividad en el servicio departamental en Canelones, conocemos a SATT. Dialogamos con su propietario, Manuel Patiño, en la sede de la empresa ubicada en Atlántida, quien nos contó sobre su trayectoria en el transporte, además de las novedades de la empresa que cuenta con 18 unidades y está incorporando tecnología. 

En el año 2010 y bajo la dirección de Manuel Patiño, comenzaba a funcionar la firma de transporte canaria con cuatro unidades y dos líneas regulares, una convertida en un circuito que une Atlántida con Estación Atlántida y la otra con recorrido desde Atlántida hasta San Luis. Hoy, a cinco años de aquel inicio, cuenta con 15 ómnibus para cumplir con los servicios de línea antes mencionados, además de que en el segundo caso este se extendió hasta Jaureguiberry, uniendo el conocido balneario con las ciudades de Pando y Soca. 

Actualmente la firma está abocada a incorporar tecnología a sus unidades, lo que va a redundar en una mejora importante en sus servicios.

SATT tiene 28 funcionarios y 18 ómnibus en total (15 para cubrir los servicios de línea y 3 para turismo), por lo que los días de Manuel Patiño son largos y llenos de trabajo, pero a base de sacrificio sigue creciendo. El día puede ser tranquilo o muy complicado, según los improvistos que vayan surgiendo. Su jornada comienza a las 3 y 30 de la mañana, antes de que salga el primer turno, y puede ser que se dé que deba subir a una unidad para hacer un turno o ir a buscar una rota. 

El nombre de la empresa S.A.T.T. (San Antonio Transporte y Turismo) debe sus siglas a la idea inicial de hacer el servicio regular entre la capital y esa localidad canaria, tras realizar la línea que tenía EOSA, previo acuerdo con la familia propietaria de la transportista que realizaba ese trayecto. La idea finalmente no se concretaría aunque Patiño seguiría en el ómnibus con su emprendimiento, realizando paseos y viajes de turismo. Tuvieron que pasar 26 años para que pudiera incursionar realmente en un servicio de línea.

Para conocer detalles de esta historia nos fuimos hasta Atlántida -donde la empresa tiene su base- para conversar con Manuel Patiño, su propietario.

¿Cómo surge la idea de prestar servicios regulares en la zona de balnearios de Canelones?

Trabajando contratado en la zona hacía el servicio a Santa Ana y Jaureguiberry, allí surgió la iniciativa de los vecinos de tener un servicio local para por ejemplo llevar a los escolares, ya que en San Luis subían más de 50 niños y los pasajeros se quejaban. Esa iniciativa no tuvo andamiento en la empresa para la que trabajaba. 

Luego de estudiar la idea inicial que era desde Estación Atlántida hasta Jaureguiberry vimos que era viable partiendo la línea en dos, o sea, haciendo una desde Atlántida hasta Estación y la otra hasta Jaureguiberry. Comenzamos con cuatro turnos hasta Santa Ana y otro que estaba todo el día entre la Estación y Atlántida en forma de circuito.

¿Qué aceptación tuvieron esos servicios iniciales?

Fue bien diferente, en el caso del servicio hacia Estación Atlántida el desafío era que la gente dejara la moto y la bicicleta para subir al ómnibus. Si bien el boleto local era un incentivo, las calles estaban en mal estado y la incertidumbre del circuito que realizamos por el Barrio Español, el City Golf, la rambla, era toda una incertidumbre, pero la respuesta fue muy buena. 

En el caso del servicio hacia Santa Ana, al principio fue muy duro, la gente te veía y te dejaba pasar, había 10 o 12 personas en la parada y por más que teníamos diferencia en el boleto no se subían. Igual seguimos “paseando” los coches casi vacíos para cumplir con el servicio, así pasamos casi dos años hasta que la gente se adaptó. En esa etapa si no hubiera sido por el turismo no podíamos haber seguido adelante.

¿Qué líneas siguieron a las iniciales?

La línea 7 que iba desde Atlántida hasta Santa Ana se extendió en el año 2012 hasta Jaureguiberry. En el año 2013 arrancamos a trabajar con la línea que tenía Zeballos Hermanos entre Costa Azul y Soca. 

También ese mismo año se nos adjudicaron las líneas que dejó COPSA, el servicio entre Soca y Santa Ana que va por las rutas 8, 9 y 70 y pasa por Capilla Cella y Piedras de Afilar. A su vez pasamos a cumplir con el servicio entre Pando y Parque del Plata, por la Cooperativa Olmos, Empalme Olmos, Estación Atlántida y Atlántida, a través de rutas nacionales Nº 8 y 11. 

¿Qué mejoras pudo realizar a los servicios de línea?

Hemos renovado los primeros ómnibus, hemos mejorado los servicios con más frecuencias y también sus recorridos, por ejemplo la línea que iba desde Costa Azul a Soca, ahora la conectamos con Atlántida. El servicios entre Parque del Plata y Pando lo mejoramos con frecuencias cada una hora para que el usuario se acostumbre desde la mañana a la noche. 

Ahora estamos incorporando tecnología a nuestras unidades, lo que nos va a permitir brindar un mejor servicio como hacer más combinaciones para los usuarios, entre otras cosas en las que avanzaremos.               

Estamos tratando de renovar los ómnibus por unidades 0 km. pero por el momento para una empresa como la nuestra es muy difícil traer vehículos nuevos sin algún plan de renovación.

SATT también ligada al turismo

José Manuel Patiño, actual propietario de SATT, trabajó muchos años en CUTCSA hasta que en el año 1994 compra un Mercedes Benz O140 con carrocería Argentina para comenzar su etapa en el turismo. 

Realizando viajes cortos en un entorno de 200 kilómetros de la capital -mayormente ligados a los paseos de escuela y clubes de fútbol- fue creciendo en servicios, lo que lo llevó a comprar un segundo ómnibus, un Ñandú ex Copay para cumplir con la demanda. Luego pasarían otros ómnibus como un Scania Independencia ex Cot. 

Ya con el emprendimiento consolidado, Patiño deja atrás sus 22 años vinculados a CUTCSA, para dedicarse exclusivamente a su empresa. 

En el año 2005 le compra a COPSA un Mercedes -Benz Marcopolo Andare con el que trabajó para esa empresa con servicios contratados. Luego vinieron otros dos ómnibus que trabajaron para COPSA: un Mercedes Benz Nielson que fue de Cáceres  y un Mercedes Benz con carrocería Caio ex Olivera. 

Si bien el mayor crecimiento en la flota se ha dado en los ómnibus de línea, nunca discontinuó su trabajo en el turismo, contando en la actualidad con tres unidades, un Mercedes-Benz, un Volvo y un Scania.

Flota de ómnibus para servicios regulares

Para sus dos servicios iniciales adquirió tres Mercedes-Benz con carrocería Busscar que originalmente fueron de Cotsur y pasaron a CUTCSA, las que junto a un Marcopolo Allegro que fue de Cutcsa Inter, realizaban el servicio. 

Luego, y con la idea de renovar las tres unidades, le compra tres Mercedes-Benz Caio Vitoria a COME, a las que después se agregarían tres Mercedes Benz con carrocería Thamco de la misma transportista (cuando ya era administrada por Solfy, de quien eran estas tres unidades).  

Los primeros ómnibus se renovaron con la llegada de cinco Caio Vitoria con caja automática que pertenecieron originalmente a CODET. 

Este año la empresa adquirió a una empresa de Durazno un Mercedes-Benz con carrocería Thamco que fuera originalmente de Solfy.