La construcción vial en América Latina: retos y oportunidades

Los países de América Latina dependen en gran medida del transporte por carretera. En Brasil, más del 60% de las cargas comerciales se desplazan por carretera; en Colombia esta cifra alcanza el 77%, y en México, el 81%. A modo de comparación, en China sólo el 21% del transporte comercial pasa por las carreteras y en los Estados Unidos, el 31%.

La baja inversión en infraestructura vial a lo largo del tiempo se refleja en el bajo porcentaje de carreteras pavimentadas en América Latina, que es de alrededor de un 20%. Sin embargo, a pesar de la desaceleración económica actual y de las perspectivas de crecimiento bajas previstas para los próximos meses, varios proyectos de construcción de carreteras están en marcha o previstos para la región.

En Colombia, por ejemplo, el Programa de Cuarta Generación (4G) Concesiones Viales prevé construir más de 5.892 km de carreteras en los próximos ocho años en más de 40 nuevas concesiones. Este es uno de los proyectos de infraestructura más ambiciosos jamás realizado en el país, que prevé una inversión de alrededor de US$ 24 mil millones. Recientemente, el gobierno de Colombia anunció un plan complementario al 4G, que incluye las vías terciarias, representadas por las carreteras de menor importancia que atraviesan el interior del país.

La Secretaría de Transporte y Comunicaciones (SCT) de México informó que en 2016, se completará la construcción/modernización de 10 autopistas con una extensión aproximada de 800 km. En Perú, La Asociación para el Fomento de la Infraestructura Nacional (AFIN), señala que entre los principales proyectos de gran envergadura que el gobierno de Pedro Pablo Kuczynski priorizará, está el restablecimiento del Programa Vial “Costa Sierra” en el litoral peruano que implica inversiones por un monto de US$ 500 millones.

Hay muchos proyectos importantes de planificación y desarrollo en América Latina, como la expansión de varios aeropuertos, la construcción de la Autopista Internacional del Norte en Perú y la reconstrucción de la Ruta 9 en Paraguay. También vale la pena mencionar las perspectivas de implantación del Corredor Bioceánico Central, que hará la integración física de América del Sur, conectando los océanos Atlántico y Pacífico. Cada país posee normativas propias en lo tocante a la construcción de carreteras. 

“Para desempeñarse exitosamente en toda la región, es necesario conocer a fondo dichas especificaciones. Trabajamos lado a lado con nuestros distribuidores a través de un equipo dedicado a entender los requerimientos de los clientes latinoamericanos para proponer soluciones eficaces en equipos, entrenamientos y servicios”, subraya Justo Santos, responsable de la gestión comercial de la línea de máquinas Volvo para la construcción de carreteras en América Latina. Fuente: Volvo CE