Con fuego y pasión desde hace cincuenta años

En la fundición de la planta Mannheim de Mercedes-Benz se producen diversas variantes de fundición gris para la fabricación de motores. A temperaturas en torno a los 1.400 grados centígrados se crean aquí materiales altamente especializados, utilizados para la fabricación de bloques y culatas para los motores.

En este lugar de la planta Mannheim se trabaja sin duda con más ardor que en ningún otro puesto de trabajo de Mercedes-Benz. En 2014 celebramos un aniversario muy especial. La «nueva» fundición de la empresa lleva ya 50 años fabricando bloques y culatas.

En 1990 se sumaron los puentes para el eje trasero. La imagen muestra a los trabajadores junto al cubilote. En este horno a base de coque se funde, entre otros, el hierro para el bloque motor de los nuevos motores pesados de seis cilindros en línea OM 470 a OM 473; unas 30 toneladas al día. La fabricación de las diversas variantes de fundición gris es un procedimiento altamente especializado. Algunos de estos singulares materiales de diseño se crean exclusivamente en los hornos de colada de la planta Mannheim. No se pueden adquirir en el mercado, y su receta es un secreto. Una de sus características es, por ejemplo, la combinación de una elevada capacidad de transmisión térmica y una gran resistencia. Las temperaturas de la colada en los cuatro hornos que posee en total la planta están exactamente definidas para cada una de las variantes de fundición gris, y llegan a superar los 1.400 grados centígrados.

Sobre una superficie de aproximadamente 64.000 metros cuadrados, unos 700 trabajadores producen al año más de 100.000 toneladas de piezas de fundición para vehículos industriales en toda clase de materiales. La primera fundición se creó ya en 1909 en el recinto de la planta. Para poder fabricar un mayor número de unidades se abrió en 1964 la «nueva» fundición.

Fotos: Ralf Kreuels