Imagine una disputa entre un camión de ocho toneladas y unos de los autos más rápidos del mundo. El auto es el Koenigsegg One:1, uno de los autos más potentes del mundo, con relación peso/potencia de 1:1, con 1360 caballos y 1360 de kilos. El camión es un Volvo FH 540, con ocho toneladas y 540 caballos, pero con una gran semejanza con el súper auto: la caja de cambios con doble embrague.