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ESPACIO UTFU: El camión, ese eslabón olvidado de la cadena agroalimentaria e industrial del país

Qué les vamos a decir de la importante sequía que atravesamos en Uruguay y parte de la región, con el cambio climático como factor fundamental, según expertos en el tema.

Esta enorme problemática que afecta a la producción nacional en diferentes formas, según sea la que se trabaje, agro, ganadería, etc., pone al transporte de carga y a muchas de sus empresas, al borde del cierre como consecuencia de la desaparición de zafras o por la baja de precios. Llevando a muchas empresas que tenían esperanzas de hacer una buena campaña, a perderlas totalmente, sin ni siquiera poder enderezar el rumbo.

Los altos niveles de informalidad no importan a nadie -ya que los controles del Estado son inexistentes, así como de los privados, es decir, cargadores y productores-. Parece ser que cada vez más ingresamos a ese espiral de convertirse en tomadores de precios y de sacrificar ganancias. Y esto es solo una parte de la historia; la otra es: ¿a todo el transporte le va mal? La respuesta es: no; hay burbujas, por decirlo de alguna manera.

El aumento de camiones en plaza, las nuevas tecnologías, los sectores que escupen camiones y esa famosa visión de que el mercado regula, es la excusa que encuentran quienes no sienten la más mínima empatía con el sector. Sorprenden las afirmaciones desde las más altas esferas del poder que sostienen que el transporte se regula solo, las leyes de mercado, y blá blá blá, no les interesa el transporte, por lo tanto se le otorgan beneficios al productor y a otros sectores, menos al transporte de carga por carretera.

Dicho esto, si empezamos a analizar la situación de hoy y el panorama del futuro, éste parece bastante oscuro. La incertidumbre, la falta de respuestas, la falta de oxígeno a quienes lo precisan por la actividad que desarrollan, en este caso el transporte de granos, no hacen más que aumentar la desesperanza.

Los transportistas tienen una frase muy conocida, “nunca se logró nada sin una medida de fuerza”. Ahora, más allá de las medidas gremiales que se puedan tomar, está la necesidad de una fuerte autocrítica desde el propio sector para analizar cómo se llegó a esta situación. Al parecer, para algunos se terminó el poco jugo que daba su camión y ya no hay de dónde ordeñar; lo peor es que muchos incumplieron para dárselo al cargador. Esto, sin lugar a dudas, forma parte del modelo que a algunos les sirve y no tienen tampoco voluntad de cambio. Así que, si no cambiamos la cabeza, no podremos cambiar nada; a no olvidarse que somos empresas y así nos deben mirar del otro lado, hay que volver a tener el respeto que nos merecemos.

En otro orden, se viene el gran hermano dos, parece que, según el propio ministerio, entre ellos no se ponen de acuerdo cuando salen a los medios a declarar. Al comienzo de este sistema se declaró que se controlaría la caminería y que iba a estar la información de las empresas a total disposición de BPS, DGI, etc. Parece cosa de locos, por no decir otra cosa.
Veremos qué pasa con esa licitación digitada (se le otorga el 20% de prioridad a un competidor). Cuando salga la misma, ampliaremos nuestros comentarios.

Terminamos por decirles que los esperamos en nuestra gremial. Si no son socios aún, tenemos una promoción especial para empresas de hasta cinco empleados; todos los servicios, excepto DGI, salen $u 4520 (cuatro mil quinientos veinte pesos). En cuanto a DGI, deben comunicarse con los contadores para saber qué tipo de empresas tienen y cuál sería el plus a abonar.

Los esperamos en Agraciada 2744 y San Fructuoso, de 9 a 17 horas o pueden llamarnos al 22019225 al 28.
Hasta la próxima, Unión de Transportes Fleteros del Uruguay

Más de 80 años trabajando por el transporte de carga terrestre del Uruguay.