Yoga, al volante
Por Ariel Levit, estudiante de yoga
Este artículo propone mejorar el desarrollo de la jornada laboral de los choferes desde la práctica del Yoga, identificando situaciones en las que puede aportar soluciones saludables y mejores hábitos, previniendo trastornos físicos y psíquicos propios de una actividad que requiere mucha concentración y muchas horas de trabajo.
El Yoga no para de extenderse y de difundirse por todo el mundo, ya no es una práctica destinada a los hindúes o budistas, ni mucho menos. El Yoga y sus prácticas ya están instalados en las escuelas de nuestro país, en las oficinas, en las fábricas con resultados maravillosos. Llego la hora de que mediante la práctica de los distintos ejercicios que propone el Yoga hagamos de nuestra querida actividad una forma de vida mucho más saludable y aún más placentera.
Sabemos de la pasión que sienten los choferes por su trabajo, les gusta conducir, les gusta lo que hacen, lo disfrutan y se identifican con su trabajo. Más allá de todo ese placer, desde el Yoga podemos ayudar a mejorar algunos inconvenientes propios de la actividad, como dolores, fatiga, tensión, estrés. Mediante el Yoga podemos obtener maravillosos resultados en muy poco tiempo y verdaderamente beneficiosos.
No es necesario que nos cambiemos de ropa para hacer Yoga, tampoco hace falta estudiar para aprender a hacer los ejercicios ni que asistamos a un gimnasio o centro especializado. Ni hacer un curso previo. Vamos a tomar y adaptar todos los beneficios que el Yoga nos da y los vamos a trasladar a nuestro puesto de trabajo, a nuestras necesidades y con nuestros horarios. El Yoga puede ser tan dinámico o tan pausado como uno quiera.
Solo hace falta comprometernos con nuestra salud, con nuestra realidad y con la actividad que tanto nos apasiona.
Presentamos entonces algunas situaciones en las que el Yoga puede ayudarnos:
Las extensas jornadas de trabajo, en ocasiones, superiores a las 12 horas, en una posición de manejo sentada, con las piernas semiflexionadas y en constate tensión, con los brazos y hombros también en flexión y tensión, pueden provocar patologías o enfermedades profesionales derivadas de la actividad: lumbalgias, dolores cervicales, fatiga, calambres, problemas musculares, hernias. Para prevenir o contrarrestar estos efectos, con el Yoga vamos a aprender ejercicios, movimientos y posturas que nos van a proporcionar flexibilidad, tonicidad muscular, irrigación sanguínea, placer.
Por otra parte, la conducción suele ser una actividad solitaria donde la compañía se encuentra en el teléfono, en la radio, en el camino, en los paradores y en nuestra propia mente. A veces esta compañía virtual nos provoca placer, emociones, ansiedad, angustia, apuros. Es aquí donde las técnicas de respiración nos van a ayudar a calmar la mente, a equilibrar nuestros pensamientos, a centrarnos en el camino.
Conducir un vehículo de largo y alto porte no es sencillo, y mucho menos en las grandes ciudades, donde no queda más remedio que “meterse”, ya que, tanto los puertos, como aeropuertos, estaciones de pasajeros, empresas, todo ha quedado dentro de la ciudad. Es ahí donde los niveles de ruido son mayores, las velocidades disminuyen, donde el trafico genera demoras, situaciones indeseables .Todo esto puede elevar niveles de nerviosismo, falta de paciencia, ira, estrés. Es en ese preciso momento donde tenemos que poner en práctica las técnicas de relajación, de concentración y de visualización que nos brinda el Yoga.
Las cabinas de estas hermosas maquinas, a veces, no están adecuadas para pasar tantas horas al volante y repercuten en los choferes las vibraciones del propio camión, de la butaca, de los pedales, etc. Estas vibraciones perturban a distintos grupos musculares, a los órganos internos como riñones y vejiga, etc., afectando al equilibrio energético de nuestro cuerpo. Así que también vamos a ponernos a trabajar las energías que recorren todo nuestro organismos para poder equilibrarlas, redireccionarlas y hacerlas circular hacia donde más las necesitemos con el fin de contrarrestar la falta de circulación sanguínea, la poca estimulación y el entumecimiento.
No podemos olvidarnos de nuestros ojos. La vista y la buena visión es fundamental para nuestra actividad y como al resto de los músculos del cuerpo vamos, también, a aprender a ejercitarlos, a cuidarlos y a darles el descanso necesario. Hay muchos factores que hacen que nuestra visión se vea afectada. La cantidad de tiempo en que mantenemos la atención en el camino, el sol de frente, los deslumbramientos por reflejos, la conducción nocturna. Vamos a considerar hábitos saludables para corregir defectos, prevenir el agotamiento prematuro, la fatiga y para conservar la agudeza visual.
Consejos prácticos
A la hora de alimentarnos e hidratarnos daremos unos consejos prácticos que tienen que ver con la nutrición, hablaremos de los tiempos dedicados a tal fin, de los horarios, de nuestras costumbres. A veces tenemos tiempo de parar y sentarnos a comer a la hora indicada, a veces debemos llegar pronto a destino, buscaremos la forma para que en cada caso poder hacerlo de la mejor forma posible, en cuanto a calidad, cantidad y armonía. Ya que, casi todos, tomamos mate, hay unos tips muy interesantes de las distintas yerbas y yuyitos y sus indicaciones para cada caso.
Mediante la práctica del Yoga vamos a aprender técnicas de respiración que nos van a ayudar a calmar la mente, a relajarnos, a incorporar energía, a bajar los niveles de ansiedad, a des-estresarnos. Vamos a poder controlar nuestros pensamientos y comportamientos. Todo de forma natural y sin los efectos secundarios de los medicamentos.
Aprenderemos ejercicios físicos y posturas corporales ideales para contrarrestar los efectos de la posición sedante que adoptamos arriba del vehículo, vamos a elongar, estirar, promover la irrigación sanguínea, fortalecer los músculos, dotarlos de flexibilidad, descontracturarlos.
Conoceremos distintos puntos en nuestro cuerpo que mediante un masajes o una torsión o simplemente una presión con los dedos vamos a hacer circular de manera equilibrada las energías a través de nuestro cuerpo, de nuestros órganos para que todo funciones mejor y en conjunto.
El Yoga beneficia a cada persona en particular y en su conjunto a las empresas, a los pueblos, a las ciudades, al país. El Yoga genera salud y mejora el marketing. Pero sobre todo, genera salud.
Entendemos que los distintos organismos que nuclean a los choferes como cámaras, asociaciones, sindicatos y federaciones deben comenzar a comprometerse con esta disciplina tan beneficiosa, tanto para los choferes, cómo para las empresas, como para el público en general que observa esta actividad desde fuera, por ejemplo, pasajeros y clientes.
“Un chofer contento es una empresa saludable y un cliente satisfecho”. Gracias al Yoga uno aprende a respirar de manera correcta, a ejercitar nuestro cuerpo de forma consciente, a relajar la mente, a equilibrar energías, a adoptar posturas correctas, a disfrutar la vida, y a recorrer el camino, nunca mejor dicho, hacia nuestro destino. El Yoga es una filosofía de vida. Lo que no seamos capaces de lograr hoy, no quiere decir que no lo podamos lograr mañana.
Más allá que nosotros de conducir ya sabemos bastante, el Yoga nos va a mostrar una nueva ruta, el camino al autoconocimiento, el camino a una realidad más saludable. Es maravilloso, es apasionante. No subestimemos lo que somos capaces de lograr. Todo lo bueno y edificante que ves en los demás, existe en ti.
No conozco a nadie que luego de haber puesto en práctica los ejercicios de Yoga, haya dejado de practicarlos. Querer estar mejor y sentirse bien nos lleva directamente a las puertas del Yoga.
Estamos acostumbrados a prestar atención al camino, a la carga, a los pasajeros, al tránsito, aprenderemos a darle importancia y a prestarle atención al nuestro organismo, a nuestra respiración, a nuestra mente, a las posturas adoptadas, a la alimentación a nosotros mismos, concentrándonos en nuestro ser.
Con Inspiración, podemos cambiar, controlar, modificar tanto sean situaciones, pensamientos, actitudes, comportamientos. Con ganas, con voluntad, con inspiración es posible. La vida es bella.
La práctica del Yoga propone respeto hacia los demás, y a nosotros mismo. A la familia, a los amigos, a nuestros tiempos, a nuestro descanso, a nuestras habilidades y a nuestras carencias. Honestidad con nosotros mismos, con nuestros límites, nuestros objetivos. Visualizarnos, observarnos objetivamente y aprender a conocernos y resolver lo que necesitemos.
Nos comprometemos con la empresa, con los cuidados del camión, con los pasajeros, vamos a comprometernos también con nuestro bienestar, eso nos hará disfrutar mucho más, las horas y días dedicadas al trabajo, al descanso, a la familia, a nosotros mismos. Comprometernos con la vida.
Si tanto nos gusta manejar, si conducir es nuestra vida, no dejemos nuestra salud en la cabina, no dejemos nuestra vida en el camino, hagamos del camino una vida saludable.
